Andaba «vitrineando» por el súper y como quería probar salsas nuevas pero andaba con poco presupuesto decidí optar por comprar esta salsa que dije hmmm si, me voy a la segura… mayo + ketchup mezclados nunca falla.
Es así como por $990 adquirí la Salsa Golf de Polo. Un envase que se veía piolita y apetitoso que calzaban perfect con la carne y arroz que había traído de almuerzo. Nada podía salir mal.
Abrí el envase y la probé… hmmmmmmmm… #eso ¿La verdad? Ni un brillo. Como que le agregaron un sabor a pepinillo que no me esperaba y que tampoco ayudaban mucho a mejorar la salsa.
Igual no sé bien ni para qué la compré si por la misma o menos plata compraba dos sachets de salsas y los mezclaba, pero bueno… todos los días se aprende algo nuevo.
¿Conclusión? Ni siquiera se molesten en pensar en comprarla porque no vale la pena.
la vida en salsa 